Nuestro primer viaje tras la cuarentena con recorrido Laredo – Royan – St. Sulpice – Elgoibar – Vitoria – Colindres – Laredo

Acompañados del futuro dueño del barco, nos aventuramos, aún llevando toda la documentación que nos dijeron que había que presentar en la frontera, sin saber si nos dejarían o no entrar a Francia.

Parece que allí el COVID19 se vive de otra manera. No encontramos ni un solo control en más de 700km, ni si quiera al entrar al país, no se aceptan pagos con contactless en ningún lugar, se paga en efectivo o con tarjeta…y lo gracioso, es que aún te hacen firmar el ticket después de pagar con la tarjeta…y yo que pensaba que eso era ya del siglo pasado, la distancia mínima de seguridad es de 1m.

Nadie, absolutamente nadie lleva mascarilla y la sensación al tratar con ellos es de pasividad total ante el posible peligro de contagio. Es como si por allí no hubiera pasado nada. Nos preguntaban, qué tal estábamos pasando la pandemia, ya que habían escuchado que había muchísimos casos de contagio…pero sin dar ninguna relevancia a que nosotros éramos españoles. Creíamos que nos iban a tratar como apestados y no, fueron incluso demasiado cercanos diría yo.

Eso si, el trato siempre agradable y educado…hasta nos invitaron a croasans de chocolate y café en la náutica.

Cargamos el barco, firmamos CMR, descansamos un rato y continuamos con el trayecto.

Llevar compañía a bordo, te mantiene más despejado y el viaje se ameniza mucho, pareciendo que se hace hasta más corto. Siempre viajamos solos y a veces se agradece llevar a un segundo de a bordo que te vaya dando charleta durante el trayecto.

De regreso, habiendo parado a comer en una estación de servicio francesa, dos hamburguesas recalentadas, mas densas que un bocadillo de sicaflex, tuvimos control de Ertzainas nada más pasar la frontera.

El encuentro ha sido corto con ellos; buenas tardes-a dónde van?, de dónde vienen?, qué llevan en el maletero?, su documentación?, buenas tardes, buen viaje, y pueden continuar. Todo bien, todo correcto.

Directos a Elgoibar a saludar a un amigo y recoger unos accesorios, de ahí a Vitoria a recoger un kayak y de ahí directos a Colindres a descargar el barco….el kayak aun tenía que llegar a Laredo donde dábamos por finalizado este trayecto.

Os dejamos una imagen, que vale más que mil palabras del nuevo propietario con su nuevo barco.

Categoria
Etiquetas

No hay comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Algunos de los enlaces de esta publicación son enlaces de afiliados. Esto significa que si hace clic en el enlace y compra el artículo, recibiré una comisión de afiliado sin costo adicional para Usted. Todas las opiniones siguen siendo mías.